La NFL llegó a un acuerdo tentativo de 765 millones de dólares para dar por terminadas las demandas por conmociones y daño cerebral entre 18 mil jugadores retirados. El convenio incluirá fondos para exámenes médicos, compensación por padecimientos relacionados a las conmociones e investigación médica.
Más de cuatro mil 500 ex jugadores, algunos que sufren de demencia, depresión o Alzheimer que atribuyen a los golpes en la cabeza, demandaron a la liga acusándola de ocultar evidencia sobre los peligros de las conmociones y de acelerar su regreso a la cancha, al tiempo que glorificaba y se enriquecía por los feroces golpes que generan titulares.
Los demandantes incluyen al menos a diez miembros del Salón de la Fama, incluyendo al ex corredor de Vaqueros de Dallas, Tony Dorsett, así como la familia del ex linebacker de Cargadores y Patriotas, Junior Seau, quien se suicidó el año pasado.
La NFL tiene un plazo de hasta 20 años para pagar la cantidad completa del acuerdo, pero la mitad del total deberá ser pagada en los primeros tres años, y el resto los 17 siguientes.
En años recientes varios ex jugadores de la NFL, así como otros atletas que sufrieron conmociones, fueron diagnosticados con encefalopatía o síndrome de disfunción cerebral tras haber fallecido.
Entre esos jugadores se encuentran Seau y el demandante Ray Easterling, quien radicó la primera querella en Filadelfia en agosto de 2011, pero luego se suicidó.