Mario Balotelli suele ser noticia por su extravagante comportamiento, pero en esta ocasión, el delantero italiano de origen ghanés ha sido la víctima.
Tal y como recoge La Gazzetta dello Sport, el delantero del Milan estaba en la ciudad suiza de Lugano (a poco más de una hora de Milán) la noche del viernes. Aparcó su flamante Ferrari en la plaza Rezzonico de la ciudad helvética y unos chicos se le acercaron para pedirle autógrafos y fotos, pero el futbolista les negó el favor.
Cuando el jugador entró a un local, los jóvenes prepararon su venganza: envolvieron el bólido de Balotelli con rollos de papel higiénico. Según la Gazzetta, además, el Ferrari del exdelantero del Manchester City estaba aparcado en una zona prohibida. (www.20minutos.com)