El jugador de la NBA Lamar Odom, dos veces ganador del campeonato como integrante de los Lakers de Los Angeles, fue detenido la pasada madrugada por conducir en estado de embriaguez, informó hoy el diario Los Angeles Times.
El deportista fue localizado por la Patrulla de Carreteras de California (CHP) en la autopista 101, a la altura del valle de San Fernando, a las 3:54 de la madrugada.
Ingresó en la prisión de Van Nuys a las 5:01, según los registros. Las autoridades afirman que Odom conducía de forma imprudente un Mercedes blanco a velocidades cercanas a las 50 mph, muy lento para ese tramo.
Los agentes trataron de que el jugador detuviera su vehículo pero Odom no hizo caso de las advertencias hasta minutos después, cuando paró el auto y comprobaron "signos objetivos de intoxicación" en el conductor.
"No pudo llevar a cabo las pruebas de alcoholemia tal y como le fueron explicadas", sostiene el informe, que apunta a la posible ingesta de alcohol y drogas por parte de Odom.
En la cárcel, el jugador declinó someterse a más pruebas pero fue puesto en libertad tras pagar la fianza de $15,000.
En las últimas semanas se ha especulado con el abuso de drogas por parte del deportista, incluidos rumores acerca de una posible desaparición tras una pelea con su esposa, la mediática Khloe Kardashian.
Su agente explicó que esa información no era cierta y que el jugador se encontraba en un hotel de Los Angeles mientras trataba de superar, rodeado de amigos, un problema de consumo de drogas.
En 2001, Odom fue suspendido en dos ocasiones por violar las reglas de la NBA en cuanto a consumo de drogas, si bien la Liga nunca entró en detalles acerca de esas infracciones.
De hecho los rumores en torno al uso de sustancias prohibidas y las dudas sobre su carácter hicieron que el jugador fuera elegido en el número cuatro del sorteo universitario (draft) de 1999, en vez del primer puesto como se especulaba.
En su carrera en la NBA, Odom ha jugado para los Clippers de Los Angeles, los Heat de Miami, los Lakers de Los Angeles y los Mavericks de Dallas. (EFE)