Nico Rosberg se impuso ayer en un accidentado Gran Premio Británico de Fórmula Uno, en el que el triple campeón mundial Sebastian Vettel tuvo que abandonar a 10 vueltas del final por dificultades mecánicas.
La tónica de la carrera fueron los problemas de neumáticos que afectaron a varios pilotos, incluso Lewis Hamilton, que partió primero. Pero Rosberg supo sortearlos para ganar su segunda competencia del año y tercera de su carrera.
El alemán Rosberg cruzó la meta delante del australiano Mark Webber, de Red Bull, que se repuso de un choque con el francés Romain Grosjean, de Lotus, poco después del comienzo. El español Fernando Alonso, de Ferrari, superó a Kimi Raikkonen, de Lotus, faltando dos vueltas para llegar tercero. (AP)