El cuadrangular 28 de la temporada para Miguel Cabrera fue realmente un cañonazo, impactó la pelota con tal fuerza que la esférica sufrió una deformación al ser conectada. Una fotografía que circula en internet y que fue tomada de la transmisión de televisión del juego entre los Tigres de Detroit, equipo de Cabrera, y los Indios de Cleveland, demuestra cómo la pelota se deformó al ser conectada por el bate del superestrella venezolano.
Hoy por hoy Cabrera es considerado por la mayoría de los expertos como el mejor bateador de las Grandes Ligas. Puede conectar para porcentaje, es oportuno y tiene poder, pero lo que refleja la fotografía es que su poder está por encima de lo normal.
Las bolas de béisbol están confeccionadas con materiales que en teoría impedirían que la pelota se deforme al ser conectada, pero la potencia con la que Cabrera saca el bate es algo imposible de medir.
Por Roberto Espinoza | Bola Ensalivada