Los caminos de Roger Federer y Rafael Nadal, quienes podrían encontrarse en los cuartos de final de Wimbledon, son el máximo atractivo del tercer Grand Slam de la temporada.
Detrás de ese tema principal, surgen también los nombres de Andy Murray y Novak Djokovic como los máximos favoritos para coronarse en la catedral del tenis mundial.
A Federer (3), campeón defensor y siete veces ganador del certamen, le toca abrir hoy el magno certamen ante el rumano Victor Hanescu, a quien ha derrotado en los cinco encuentros en los que se han enfrentado previamente.
En octavos de final el helvético podría jugar ante el polaco Jerzy Janowicz (30), peligroso por su potente saque. “Me gustan los cuadros difíciles”, aseguró Federer. “No les huyo. No hay control sobre eso y me tocó un cuadro muy difícil con Rafa en los cuartos de final. “Mi objetivo por ahora es la primera ronda. Si quieres ganar un torneo tienes que derrotar a los mejores y es por lo que estoy aquí. Me siento feliz de estar de regreso. Siempre es un privilegio”, añadió Federer, quien cumple diez años de su primer título en Wimbledon y su primero de los 17 Grand Slams que suma hasta ahora.
Mientras que Nadal abre el torneo ante Steve Darcis, contra el que tiene un solo encuentro, en el que el manacorí se impuso. Para los octavos de final, Nadal podría encontrarse ante el suizo Stanislas Wawrinka (11) o ante el estadunidense John Isner (18), para dar paso al potencial duelo ante Federer, en lo que sería parte de una temporada que es, por mucho, la mejor de cualquier jugador en el circuito de la ATP.
“Desde que regresé he podido jugar los torneos que quería. Antes de regresar decía que este año era uno de transición, pero ahora la situaciñón obviamente cambió”, señaló Nadal, campeón del Abierto Británico en 2008 y 2010.
“Voy a competir aquí lo mejor posible. Voy a tratar de dar lo mejor y a ver qué es lo que sigue para mí”, añadió el ganador de siete títulos en 2013, una temporada en la que suma nueve finales en sendos torneos. Superado el duelo, el problema para Federer o Nadal no termina ahí, ya que en semifinales podrían encontrarse ante el consentido local y finalista de 2012, Andy Murray (2)
. Y la cereza en el pastel, una final contra Novak Djokovic, quien tiene un camino sencillo en el papel, coronaría un torneo inolvidable.
Serena, gran favorita
Con 31 victorias en fila y seis títulos ganados en el año, parece que no hay quien haga sombra a la estadunidense Serena Williams. Llega a Wimbledon decidida a llevarse su sexta charola de campeona del Grand Slam que se juega sobre pasto.
En medio de una polémica por la guerra de declaraciones que va más allá de las canchas entre Williams y la rusa Maria Sharapova, el Abierto Británico luce propicio para que ambas arreglen su situación personal sobre el césped, en la final del certamen.
“Voy a seguir el consejo (de Sharapova) y me voy a centrar sólo en el tenis. Tengo el mayor respeto por Maria dentro y fuera de la cancha”, dijo Serena ayer en conferencia de prensa.
Serena comenzará hasta mañana su participación en el certamen ante la luxemburguesa Mandy Minella, y tiene la posibilidad de superar la marca de su hermana Venus, con quien está empatada en el número de títulos ganados en el certamen inglés.
Venus estará ausente por primera vez desde 1997 del césped del All England Club debido a una lesión en la espalda.
Mientras que Sharapova, tercera favorita y campeona en 2004, tendría un poco más de dificultades en su camino.
La rusa arranca ante la francesa Kristina Mladenovic, 37 del ranking de la WTA, y en los cuartos de final se enfrentaría a la italiana Sara Errani (5) o a la danesa Caroline Wozniacki (9).
Pero en semifinales existe la posibilidad de enfrentarse a la peligrosa bielorrusa y segunda sembrada, Victoria Azarenka. El primer partido para la bielorrusa será ante la portuguesa Maria Joao Koehler, y en los cuartos de final podría toparse con la campeona de 2001, la checa Petra Kvitova. (excelsior)
