Nunca pensó Sergio García que una frase le podría traer tantos problemas. La pasada semana, el golfista de Castellón broméo cuando le preguntaron si invitaría a cenar a Tiger Woods: “Le invitaremos todas las noches. Le serviremos pollo frito”. El consumo de pollo frito por parte de los afroamericanos es un estereotipo que se remonta a la época de la esclavitud y que resulta ofensivo en Estados Unidos.
A pesar de pedir disculpas y negar el componente racista de su frase, le puede costar muy caro.
TaylorMade-Adidas, la firma de ropa que lo patrocina, ha emitido un comunicado que recoge CNN en el que explica que “el comentario de Sergio García es ofensivo y de ninguna manera se alinea con los valores de TaylorMade-Adidas y su cultura corporativa”. En el comunicado, la empresa dice que se pusieron en contacto con el jugador de Castellón y que aunque creen que su arrepentimiento es sincero, “discutimos con Sergio que sus comentarios están claramente fuera de los límites y estamos estudiando el asunto”.
TaylorMade-Adidas patrocina a Sergio García desde hace ya 11 años y se estima que percibe 16,2 millones de dólares al año.
Aluvión de críticas
Además de este contrato, también peligra la reputación de Sergio García en Estados Unidos. El jugador de Burriol está recibiendo muchas críticas por parte de la prensa especializada en Estados Unidos y Reino Unido. Así, John Huggan escribe en la prestigiosa revista Golf Digest que la broma de García “es un reflejo de total ignorancia” y lo califica de “mimado” e “inmaduro”.
Ferrell Evans, en una columna de la web de ESPN, asegura que García “ha jugado lo suficiente en Estados Unidos como para conocer el paisaje racial”. Cameron Morfit, experto en golf de la revista Sports Illustrated, dice que “García es el candidato más obvio para un psicólogo deportivo que he visto” y lo acusa de haber lanzado “tanta basura que ahora ha cavado un hoyo tan profundo que no puede salir de él por sí mismo”. Y en el mismo medio, Michael Rosenberg afirma que “(Sergio García) es un quejica, es mezquino y piensa que cada nube oscura del cielo le mira a él” y lo compara con Tiger Woods, que “es un campeón, uno de los mayores competidores que se ha visto en su deporte” y finaliza su columna asegurando que “Sergio García intentó ganar una discusión y perdió. Tiger Woods intenta ganar torneos de golf, y lo consigue”. (20minutos.es)